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Durante esta semana, y dentro de la Estrategia de Desarrollo Urbano Sostenible e Integrado (Edusi), Lipasam ha iniciado la instalación de contenedores de tapa marrón para biorresiduos en distintos barrios del Distrito Norte y Macarena – Se han adquirido 100 contenedores y un camión recolector - La apertura del contenedor se debe realizar con tarjeta electrónica - Posteriormente los residuos están siendo recogidos selectivamente y trasladados a planta de tratamiento para su aprovechamiento

El Ayuntamiento de Sevilla, a través de Lipasam, va a comenzar la tercera fase de implantación de un nuevo contenedor para la recogida selectiva de biorresiduos o materia orgánica biodegradable (restos de alimentos y podas) en el viario público, en esta ocasión en la zona norte de la ciudad. En primer lugar, se ha iniciado la colocación de 22 contenedores en el Distrito Macarena, concretamente en los barrios de La Palmilla, Doctor Marañón, La Paz, Las Golondrinas, Las Avenidas, Macarena Tres Huertas y Macarena Cinco Huertas. Semanas después, se finalizará la implantación de dicho contenedor en la zona, con la instalación de otras 68 unidades en los barrios de San Jerónimo y La Bachillera, del Distrito Norte.

Estos 90 contenedores, que deben ser abiertos con la ayuda de una tarjeta electrónica, más otros 10 para reposición, han supuesto una inversión de 125.500 Euros. Además, se ha adquirido un camión recolector para estos contenedores, con una inversión de 278.000 Euros. En total, se trata de más de 400.000 Euros de inversión con el objetivo de dar un paso más en la diferenciación de los residuos, para posteriormente trasladarlos a planta de tratamiento, con el objetivo de que puedan ser valorizados y transformados en compost. Ambas inversiones están cofinanciadas por el Fondo Europeo de Desarrollo Regional en el marco del Programa Operativo Plurirregional de España 2014-2020.

Dicho contenedor, con tapa de color marrón, al igual que en otras zonas de la ciudad, se colocará junto a las islas de selectiva, es decir, se suman a los contenedores para vidrio, papel y cartón, y envases ligeros.

La recogida de estos residuos se inició en Sevilla en junio de 2017, con la implantación del sistema en mercados y otros grandes generadores de residuos como hoteles y hospitales, además de en varios puntos del Casco Antiguo. Además, este contenedor ya se ha instalado en Sevilla Este, Bellavista, Bermejales, Jardines de Hércules, Heliópolis, Pineda, El Cano y Pedro Salvador. Hasta la fecha ya se han recogido más de 5 millones de kilogramos de biorresiduos.

Este modelo incluye la novedad de su uso con una tarjeta electrónica, que al aproximarla a un lector ubicado en la parte superior del contenedor, permite la apertura de la tapa. Con el uso de dicha tarjeta se garantiza que los ciudadanos realicen una correcta separación de los biorresiduos depositándolos en el contenedor específico.

La puesta en marcha de este nuevo sistema está contando con actuaciones informativas, por parte de Lipasam, en las que se ya se ha explicado a las Asociaciones de Vecinos el correcto desarrollo del sistema de recogida y cómo debe ser utilizada la tarjeta electrónica, además de cómo solicitarla. A esta acción se suma una campaña de buzoneo, en toda la zona, a través de la que se facilita un folleto informativo y la tarjeta que posibilita la apertura del contenedor. Además, a todo ciudadano que lo solicite se le obsequiará con un cubo para depositar los residuos orgánicos y con un juego de bolsas de rafia para poder separar las otras fracciones de residuos. Por otra parte, se realizará una campaña informativa a todos los comerciantes de la zona y otra a través de redes sociales.

Asimismo, los ciudadanos podrán conseguir la tarjeta, de forma gratuita, en el Punto de Atención Ciudadana del Distrito Municipal o solicitándola a través del 010 o 955010010 o www.lipasam.es.  

Esta medida, enmarcada dentro del Programa de Gestión y Prevención de los Residuos en Sevilla, se ha tomado en base a lo establecido en la Directiva (UE) 2018/851 del Parlamento Europeo y del Consejo, de 30 de mayo de 2018, en la que se fija la obligatoriedad de la recogida selectiva de los biorresiduos para antes del 31 de diciembre de 2023. Finalmente, las nuevas normas establecen medidas para el reciclaje de residuos municipales, fijándolo en un 55% para antes de 2025.